Como una forma de combatir los efectos nocivos del cambio climático, la ONU trazó un plan de aquí a cinco años: plantar 7,8 millones de árboles en todo el mundo.
En el marco del día mundial de la Tierra -fechado el 22 de abril- el organismo pretende no solo que se cuide el entorno natural si no fomentar la acción colectiva en favor del medioambiente con acciones concretas.
Es de conocimiento masivo que plantar un árbol hace bien a la naturaleza, pero en específico lo que hace es absorber el exceso perjudicial de CO2 presente en la atmósfera.
Además, permiten respirar aire limpio, dado que también absorben los olores y los gases contaminantes y las partículas dañinas del aire, atrapándolos en sus hojas y su corteza.
En cuanto a los animales, permiten la conservación de las especies y una mayor conectividad entre los ecosistemas. Y su presencia para la vida humana fomenta la comunidad, proporciona alimento y energía.
