A pocos días de dar por finalizado el primer semestre del año, el cansancio se hace evidente. Las ganas de descansar se convierte en una necesidad latente para la mayoría. Sin embargo, no todos tendrán la suerte de disfrutar de tan anhelado relajo.
El exceso de trabajo, los estudios o algunas otras circunstancias de la vida cotidiana pueden significar, más temprano que tarde, sufrir de estrés. Por ello, es primordial cambiar algunos hábitos para no colapsar como la regulación de ciertas comidas y la ingesta de determinados alimentos pueden ser de gran utilidad a la hora de evitar ese cansancio mental.
Las vitaminas A, C, D y E son las más indicadas para estos casos. Cuando sientas que no puedes más, el consumo de arroz, almendras, arándanos, palta, espinacas, salmón, levadura de cerveza e infusiones de té verde te serán de gran ayuda.
Otros alimentos que contribuyen a mantener la calma son los lácteos. El calcio por esencia es un relajante natural, por lo que consumir leche, yogurt, quesos –todos bajos en grasa- también servirá para evitar el estrés.
Un mito se ha generado en relación a si el consumo de chocolate provoca relajo o adicción. Mientras unos aseguran que calma la ansiedad y entrega una sensación de calma, otros consideran que finalmente su habitual consumo se convierte en una adicción. Dicho esto, lo cierto es que los médicos recomiendan comer chocolate y dulces en su justa medida, lo que saciará la ansiedad y ayudará a relajarte.
Hay que recalcar que ningún alimento, por sí mismo puede considerarse como antiestresante, aunque, es innegable que consumir algunas de estos productos proporcionan una sensación de placer y relax, que mejora nuestra salud.
