
Universidad de Chile se farreó de manera increíble su paso a los octavos de final de la Copa Libertadores al caer como visitante ante Botafogo, en un encuentro que mostró que todavía no está para dar el salto internacional.
El cuadro de Gustavo Alvarez necesitaba un empate para seguir en el certamen continental y todo comenzó de gran manera, con llegadas de peligro al arco local y luego a los 23 minutos se quedó con un hombre de más, tras la expulsión de Jair Cuhna por una patada contra Charles Aránguiz.
Cuando parecía que la desesperación consumiría a Botafogo y encontraría a una Universidad de Chile mejor parada para mantener la igualdad e incluso apostar por la victoria, a los 38 minutos apareció Igor Jesus para capitalizar una seguidilla de errores en la salida azul.
Con la ventaja, el actual campeón de Copa Libertadores se refugió y apostó por las salidas en contragolpe, generando innumerables ocasiones de peligro a la portería de Castellón, anotando el 2-0 a los 55′, pero fue anulado por mano previa gracias al VAR.
A pesar de los cambios ofensivos de Alvarez, la U no logró capitarlos en goles y solo se generó esporádicas situaciones de gol, siempre encontrando la férrea defensa de Botafogo, que reventó todos los balones.
Con el pitazo final fino la alegría local, el desazón azul y seguir vigente la racha de 13 años en que Universidad de Chile no puede pasar de ronda en Copa Libertadores. Ahora se viene la Copa Sudamericana, pero no será lo mismo.