Este miércoles el Banco Central entregó el Informe de Política Monetaria (IPoM) de junio, donde se elevó la proyección del crecimiento de la economía de Chile para 2025, en medio de la incertidumbre global a raíz de la política comercial de EEUU y los conflictos que tienen lugar en Medio Oriente.
En el balance, el ente emisor corrigió la proyección de la actividad para este año, pasando desde el rango 1,75%- 2,75% a uno entre 2% y 2,75%.
El reporte recalca que la actividad chilena mostró un dinamismo por sobre lo esperado en los primeros meses del año, lo cual se relaciona con el desempeño de los sectores exportadores, resaltando el aporte de la producción frutícola, industrial y pesquera, a lo que se sumó un mejor resultado de varios rubros de servicios y del comercio, apoyado este último por la mayor llegada de turistas extranjeros.
Con respecto a las expectativas de inflación, el índice ha evolucionado acorde con lo previsto, con una trayectoria de la inflación subyacente (sin volátiles) menor que lo que se anticipaba.
Con esto, la proyección se ha ido realineando con la meta del 3%, que se estima que llegaría en la primera mitad del 2026.
El nuevo IPoM en medio de la incertidumbre global
“La reacción de los mercados financieros globales no ha sido la habitual frente a eventos de alta incertidumbre, observándose un aumento de riesgo de los activos estadounidenses. Es posible que ello refleje las mayores preocupaciones por su situación fiscal e institucional”, sostuvieron desde el Banco Central sobre el impacto de las tensiones comerciales.
En el plano local, el ente emisor destacó el fortalecimiento de monedas distintas al dólar y que por el momento las medidas comerciales de Trump no han tenido impactos significativos.
Sobre la escalada del conflicto en Medio Oriente, se menciona que “este es un evento que comenzó a observarse con más fuerza posterior al cierre estadístico de este informe, que fue el 11 de junio, por lo que sus efectos no están considerados en el escenario central de proyecciones”.
