A situaciones desesperadas, medidas desesperadas.
Porque salió un poquito forzado. Con una mano en el corazón, un poquito artificial se vio el accidental y espontáneo descuido sufrido por la recién incorporada notera del Buenos Días a Todos, la periodista Bernardita Middleton, cuando esta mañana se lanzó de piquero al mar y terminó perdiendo por unos segundos la parte de arriba de su bikini calypso.
Como una extraña y un poco gratuita orden, escondida tras una búsqueda de chacoteo y/o bautizo, desde el estudio Karen Doggenweiler y Rodrigo Muñoz invitaron, sugirieron, mandaron a la joven reportera viñamarina a terminar su despacho desde la playa de Reñaca con un piquero. “Me la voy a jugar por el Buenos Días a Todos” dijo ella, simpática, obediente, jugada y sensual.
Se deshizo tímidamente de su vestido azul y partió corriendo al agua. Acá la suspicacia. Porque se lanzó una vez y no pasó nada. Pero cuando abandonaba las frías aguas del Pacífico desde atrás de cámaras llegó la instrucción a que volviera al agua.
Ahí fue cuando sucedió el impasse. Tras el segundo chapuzón, la corriente y la espuma de las olas reventadas le quitaron la pieza superior de su bañador a Bernardita.
Las risotadas no se hicieron esperar. Bernardita, tierna, se reía coqueta también, mientras desde la dirección repetían el momento del accidente retrocediendo y adelantando, haciendo más evidente todavía que la más-vieja-que-el-hilo-negro técnica para levantar el rating había funcionado.
El video completo fue subido a la página de TVN.
