Este procedimiento quirúrgico se utiliza para tranformar los genitales hacia el sexo contrario. El proceso involucra un desgaste emocional y en el bolsillo del paciente, pero es un tremendo paso para establecer la identidad de género que le acomoda.
En Estados Unidos se practican entre 100 y 500 operaciones de reasignación al año y, hasta el momento, resulta más efectivo cuando se realiza de sexo masculino a femenino, por la dificultad de crear un órgano reproductor masculino que funcione completamente.
La cirugía que puedes ver en este GIF extendido, implica la remoción de los testículos y la inversión del pene, y al procedimiento se le denomina, por lo general, vaginoplastía.