Vyacheslav Oliynyk, ex luchador ucraniano y campeón olímpico en los juegos de verano de 1996 en Atlanta, fue el protagonista de una impresionante –y por cierto lamentable- pelea con siete policías, quienes intentaban detenerlo por manejar bajo ebrio.
Le habrían arrojado gas pimienta, le pegaron con lumas, la fuerza policial hizo lo imposible por detenerlo, y recién al sumarse un séptimo oficial pudo se detenido.