A casi tres meses de su arresto, el caso de Benjamín Marcelo Guerrero Cruz, un adolescente chileno de 18 años detenido por agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en Estados Unidos, continúa generando preocupación y apoyo entre su comunidad en California. Fue el pasado 8 de agosto cuando fue detenido mientras paseaba a su perro en Los Ángeles
Según el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), el estudiante de último año de preparatoria —enseñanza media en Chile— habría permanecido en el país más de dos años después de la fecha límite de su visado, lo que se consideró un “abuso” del Programa de Exención de Visa (Visa Waiver Program, VWP), que le exigía abandonar el territorio estadounidense el 15 de marzo de 2023.
Guerrero vive en Estados Unidos junto a su madre y sus tres hermanos, uno de seis años y dos gemelos de apenas cinco meses. El Departamento de Seguridad Nacional aseguró al medio local KTLA que continuará bajo custodia en espera de su deportación, lo que generó indignación en la comunidad que rodea al nacional.
Las protestas de profesores en California por adolescente chileno detenido
En respuesta, docentes y vecinos de la zona han impulsado una campaña bajo el lema “Educación, no deportación“, exigiendo su liberación y denunciando las condiciones de su detención. “Lo tratan como a un prisionero, no puede ir a ningún lado, no puede hacer nada. Quiere salir“, relató la profesora Lizette Becerra al citado medio. Su colega Ron Gochez añadió que las autoridades deberían permitirle asistir a la escuela y estar con su familia.
Vecinos también se han sumado al llamado. Valerie T, quien presenció la detención, expresó: “Quiero que termine su último año de instituto, que lo disfrute como cualquier otro chico de 18 años, y que se reúna con su familia“. La mujer, que lo ha visitado en varias ocasiones desde su ingreso al Centro de Detención de Adelanto, describió la experiencia como devastadora: “Es muy triste. Es realmente desgarrador y traumático para él. Nunca volverá a ser el mismo“.
Mientras espera el proceso de deportación, la familia de Guerrero Cruz lanzó una campaña en GoFundMe para recaudar fondos “para luchar por su regreso o ayudarlo a rehacer su vida si es deportado“. Según denunciaron, el joven se encuentra “hacinado en una celda con otras 50 personas, sin acceso a higiene básica, calor ni alimentación adecuada“.
La campaña busca recaudar US$90.000 para afrontar las necesidades “enormes y urgentes” que atraviesa su familia.