Esta mañana, el fiscal Sergio Moya confirmó que se están realizando nuevas diligencias luego de las declaraciones de uno de los socios de Caval, Mauricio Valero, respecto de un supuesto vínculo laboral entre Sebastián Dávalos y el empresario Gonzalo Vial mientras aún trabajaba en el Gobierno.
El Mercurio reveló este fin de semana este hecho, agregando una declaración de Valero quien acusa no haber declarado antes contra Dávalos por temor a represalias. Se trataría de boletas que emitió el marido de Natalia Compagnon en 2012 por más de diez millones de pesos mientras trabajaba en el Ministerio de Relaciones Exteriores.
En conversación con Cooperativa, Moya afirmó que “la semana pasada, el imputado Valero pidió prestar declaración. Él tiene derecho a declarar en todas las instancias del procedimiento, nosotros recogimos su testimonio y eso puede motivar una nueva diligencia y eso está en curso“.
De acuerdo al reportaje que denuncia a Dávalos, serían asesorías comunicaciones aunque “las mismas no corresponden a la asesoría que en ella se expresa; esto porque Natalia Compagnon decidió que su marido emitiera boletas con dicha ‘glosa’ por los trabajos que efectuaba para Gonzalo Vial, ya que él aún se desempeñaba en un cargo de Gobierno; y, según ella, consideraba que una asesoría comunicacional no implicaba una transgresión administrativa”.
Valero también se refirió al rol del tío de Compagnon, Waldo Rojas, afirmando que se sintió “engañado y utilizado por Natalia, quien desarrollaba una agenda propia y paralela de negocios en concomitancia con Waldo Rojas y Sebastián Dávalos, quienes desarrollaban negocios valiéndose de la empresa Caval, pero sin integrar las utilidades de estos negocios a la misma“.
El abogado de Compagnon y Dávalos, Antonio Garafulic, manifestó que “me estoy dando por notificado de la filtración de la declaración por el diario. El lunes presentaré una querella por violación de secreto”.
