El obispo Alejandro Goic compareció por más de tres horas en la Fiscalía de Alta Complejidad de Rancagua, donde prestó declaración en calidad de testigo por los eventuales abusos sexuales cometidos por “La Familia” en la diócesis de dicha ciudad.
Esta diligencia fue solicitada por el propio Goic, según explicó su abogado Mario Márquez, quien expresó que busca “ofrecer toda su colaboración”.
El sacerdote dejó las dependencias de la Fiscalía, donde fue interrogado por el persecutor Sergio Pérez, sin prestar declaraciones.
Por su parte, el obispado de Rancagua entregó detalles del encuentro señalando que Goic ofreció “los antecedentes que él posee y que puedan ayudar en la investigación”.
Junto con ello, “le ha solicitado información al fiscal que pueda contribuir al proceso que se realiza en la Iglesia”.
Este caso salió a la luz tras un reportaje de Canal 13, donde se dieron a conocer las denuncia contra el párroco de Paredones, Luis Rubio Contreras, quien junto a otros sacerdotes conformarían la autodenominada “La Familia”, cuyos miembros habrían cometido abusos sexuales.
Ante esto, la diócesis de Rancagua decidió suspender a 14 sacerdotes, además de entregar los antecedentes a la Justicia y al Vaticano para un eventual juicio canónico, consignó T13.
