Secciones
País

“Supuse que le iban a ir a pegar”: amigo del joven descuartizado reveló nuevos detalles del crimen

La víctima fue agredida por un grupo de personas, luego de una discusión por el no pago del arriendo de una vivienda tomada en la calle Cóndor.

El no pago del arriendo de una vivienda de la calle Cóndor, en Santiago Centro, habría dado inicio a los hechos que terminaron con la muerte y el descuartizamiento del joven colombiano de 24 años Jhon Sebastián Grueso Vásquez, según el testimonio entregado por un amigo de la joven víctima.

De esta forma, el caso del crimen tomó un nuevo giro, ya que por la brutalidad del hecho se estimó inicialmente que se trataba de un ajuste de cuentas o un crimen cometido por sicarios contratados para dicho propósito.

Es que según reveló un amigo de la víctima, en realidad todo se inició por el no pago por parte de una mujer del arriendo que le correspondía.

De acuerdo con lo revelado por el sujeto, en este contexto se generó una fuerte discusión entre el joven y la mujer, ante lo cual intervino un grupo de personas que lo golpearon hasta provocarle la muerte.

Yo estaba esa noche en el Parque Almagro cuando llegó una muchacha a decir eso, y vinieron un poco de muchachos y se le metieron a la casa“, reveló el amigo de Jhon Sebastián.

“No sé si ahí fue que le hicieron todo, porque yo lo único que sé es que se reunieron, y yo supuse que le iban a ir a pegar“, detalló.

Siete personas detenidas

Durante la jornada del lunes efectivos de Carabineros realizaron un allanamiento en la mencionada casa de la calle Cóndor, donde un total de siete personas fueron arrestadas.

De acuerdo a lo informado, dos de los detenidos serían los autores materiales del crimen y desmembramiento de la víctima, mientras que las otras cinco personas cumplieron el rol de encubridores.

Notas relacionadas








No creo en el mejor disco del año

No creo en el mejor disco del año

Dicho eso no pretendo evangelizar a nadie. No vengo a dictar cátedra ni a levantar un tótem. Simplemente me animo, en este momento del año tan dado a los balances, a hablar de un disco. No el disco. Mi disco. El que, sin avisar, fue compañía, refugio y espejo. En mi caso, ese viaje personal tuvo nombre propio: Twilight Override, de Jeff Tweedy.

Foto del Columnista Mauricio Jürgensen Mauricio Jürgensen