Desde el Gobierno, los ministros de Seguridad Pública y de Justicia, Luis Cordero y Jaime Gajardo, respectivamente, abordaron la liberación de Osmar Ferrer, presunto sicario de José Reyes, conocido popularmente como el Rey de Meiggs.
El pasado 10 de julio, el sujeto salió caminando de Santiago I luego de que Gendarmería recibiera una orden judicial que revocaba las medidas cautelares que, 24 horas antes, le había impuesto el Octavo Juzgado de Garantía.
Al respecto, Cordero señaló que “en el transcurso de la mañana… Hoy es día de pleno en la Corte, así que seguramente el Poder Judicial debería emitir alguna opinión sobre esto“.
Para el secretario de Estado “todas las combinaciones posibles son terribles. Primero, por el impacto que tiene esa resolución; segundo, por una cuestión que para las policías y el Ministerio Público es especialmente difícil”.
“Este es un hecho extremadamente grave, no sólo por el impacto que tiene el sujeto que se libera, sino porque impacta directamente en la confianza del sistema de justicia, ese es el punto central. En un contexto global, donde tenemos un debate sobre la forma en que las instituciones deben abordar su permeabilidad ante las organizaciones criminales”, añadió.
Además, aseveró en Radio Pauta que genera “la indignación y una frustración muy grande porque todos los esfuerzos que llevan a cabo las policías y el Ministerio Público para el esclarecimiento y la detención de estos sujetos con rapidez, se ven frustrados por consecuencias de estas características“.
Salida de imputado fue “por el conducto regular”
También desde el Gobierno, el ministro de Justicia, Jaime Gajardo, calificó de impresentable la liberación del presunto sicario del Rey de Meiggs.
En Radio Universidad de Chile, el secretario de Estado indicó que “esto se encuentra en investigación. Es un hecho gravísimo, que hay que investigar con todas las diligencias y ajustar los protocolos que haya que ajustar para que no vuelva a ocurrir”.
“Gendarmería revisó ayer los procedimientos que se llevaron adelante respecto a este caso, y pudo descartar que hubiéramos sido nosotros, de algún tipo de alteración del sistema informático. La solicitud de levantamiento de medida cautelar se llevó por el conducto regular, y cuenta con medios de verificación regulares“. agregó.
Tras descartar el hackeo a Gendarmería, Gajardo manifestó que “no sabemos qué habría ocurrido en el otro ámbito, que es en el tribunal de garantía”.
“Si fue un error, es impresentable. Si no fue un error y hay algún tipo de suplantación, o falsificación en el ámbito del tribunal, es algo muy complejo, pero son cuestiones que va a tener que determinar la justicia“, cerró.