Duro golpe para Marcel y el Gobierno: diputados rechazan la reforma tributaria
La iniciativa emblemática del ministro de Hacienda no consiguió los votos necesarios para avanzar en su discusión en general.
Por Sebastián Dote![](https://www.eldinamo.cl/wp-content/uploads/2023/03/08-164806_j9im_A_UNO_1441936-880x500.jpg)
La Cámara de Diputados rechazó este miércoles en su discusión en general el proyecto de reforma tributaria del Gobierno del presidente Gabriel Boric, en una dura derrota para el Ejecutivo y para el ministro de Hacienda, Mario Marcel.
La iniciativa, una de las emblemáticas para la administración de Apruebo Dignidad y del Socialismo Democrático, consiguió 73 votos a favor, 71 en contra y tres abstenciones.
Para su aprobación requería de 78 votos de la Cámara Baja, los que no se consiguieron debido a múltiples ausencias y abstenciones, las que incluso vinieron desde el oficialismo. Por ejemplo, las frenteamplistas Claudia Mix (Comunes) y Lorena Fríes (CS) no estuvieron en la sala y se parearon con otros legisladores. Tampoco estuvieron presentes las independientes de izquierda Mónica Arce y Pamela Jiles, al igual que la ecologista Viviana Delgado.
La reforma clave para el Gobierno
La reforma tributaria era clave para el Gobierno, debido a que con ella se pretendía financiar gran parte de las medidas sociales incluidas en su programa.
El proyecto, que fue presentado a medidos del año pasado, fue defendido por el presidente Boric, quien aseguró que con él se “atacará las bases de la desigualdad, gravando los altos ingresos y patrimonios, las rentas mineras y los resquicios legales para financiar el cumplimiento de derechos sociales en salud, pensiones y cuidados”.
En lo concreto, la reforma fijaba el establecimiento de un impuesto al patrimonio que gravaba a aquellas personas naturales con domicilio o residencia en Chile cuando su patrimonio era superior a 6.000 UTA en dos tramos. Si el patrimonio oscilaba entre 6.000 y 18.000 UTA el gravamen sería de 1%; y con una tasa de 1,8% para quienes excedían los 18.000 UTA. Se trataba de un impuesto que se determinaría anualmente el 31 de diciembre, debiendo ser declarado y pagado en junio del año siguiente.
Durante esta discusión, el ministro de Hacienda explicó que “dado que este es un impuesto que grava un patrimonio que a su vez se ha ido generando y que se va modificando año a año en función del uso del destino, de las rentas que tienen los contribuyentes, se preparó una indicación para establecer una carga tributaria máxima”.