Una compañía holandesa está buscando astronautas voluntarios que deseen viajar a Marte en 2023. Pero hay un detalle: quienes sean seleccionados no volverán jamás. En el Planeta Rojo vivirán el resto de sus vidas y morirán ahí, señala la organización sin fines de lucro Mars One.
“Probablemente haya un crematorio”, aseguró Bas Lansdorp, su director ejecutivo. “Será tarea de la gente en Marte decidir qué hacer con los muertos”, añadió.
Precisamente que se trate de un viaje de ida es lo que hace que la misión sea posible, ya que se reducirían costos y la tecnología para un vuelo de regreso, informa el sitio de Mars One.
Según la convocatoria, cualquier persona podrá calificar para un asiento en la nave, siempre y cuando pueda pagar la tarifa.
Mars One pretende enviar varios cohetes, construir una colonia en Marte y hacerla crecer con una tripulación cada vez mayor. El presupuesto para una colonia es de 6,000 millones de dólares, dijo Lansdorp.
Una segunda tripulación se unirá a la primera en 2025 y varias más lo harán en los años siguientes. Cada viaje llevará a dos hombres y dos mujeres, por lo que la reproducción en Marte será viable, aunque no sea esa la intención. “No enviaremos parejas”, indicó el director ejecutivo.
Con la llegada del sector privado al mapa espacial, son varias las compañías que buscan hacerse un lugar en el juego, y si bien la de Mars One es una de las ideas más audaces, no debería ser desechada antes de tiempo.
