La periodista china Zhang Zhan arriesga hasta cinco años de cárcel tras ser detenida en mayo pasado por su cobertura del brote de coronavirus en la ciudad de Wuhan.
La también abogada, quien ejerce el periodismo ciudadano en varias plataformas digitales, fue acusada de “provocar peleas y problemas”, en un cargo que habitualmente se impone a los disidentes del gobierno, según lo informado por The Guardian.
La periodista, de 37 años, entregó algunos detalles sobre la situación de Wuhan durante los primeros días de la circulación del COVID-19. Terminó siendo detenida en mayo, pasando todo este tiempo en una prisión de Shanghái.
Zhang fue acusada formalmente de distribuir “información falsa mediante textos, vídeos y otros medios a través de redes sociales en Internet como WeChat, Twitter o YouTube”. También fue imputada por entregar entrevistas a medios extranjeros como Radio Free Asia y Epoch Times, donde supuestamente “especuló maliciosamente sobre la epidemia de COVID-19 de Wuhan”.
El caso es seguido con atención por la organización Chinese Human Rights Defenders (CHRD), que afirmó que la reportera publicó antecedentes sobre “arrestos de otros reporteros independientes y el acoso contra familias de víctimas que reclamaban que alguien rindiera cuentas”.
Zhang -quien también fue arrestada en 2019 por expresar su apoyo a los activistas de Hong Kong- inició una huelga de hambre en septiembre pasado y enfrenta un complejo panorama judicial, teniendo en cuenta que uno de sus abogados no fue autorizado para participar de su defensa.
