La policía holandesa arrestó a treinta miembros de la organización Greenpeace en Rotterdam. Esto se produjo luego de que más de 80 ambientalistas intentaran detener en la madrugada del miércoles al buque petrolero ruso Mikhail Ulyanov, que llevaba las primeras 70 mil toneladas de petróleo extraído del Ártico.
Greenpeace informó de que las embarcaciones auxiliares del buque Rainbow Warrior bloquearon el paso del bote ruso, que se disponía a transportar el primer cargamento de petróleo de una nueva plataforma marítima en el Ártico.
Entre los detenidos que ya fueron liberados se contó a la activista argentina, Fabiana Bellina.
Los activistas lograron escrito “no al petróleo del ártico” en grandes letras en el casco del barco, consigna BBC.
La carga del barco iba a ser el primer envío de desde la instalación petrolífera de Prirazlomnaya, de propiedad del gigante energético ruso Gazprom, que fue escenario de otra protesta de la organización en septiembre, después de la cual varios activistas fueron arrestados y detenidos.
La ONG exige que se declare un santuario en la zona inhabitada del polo norte y que se prohíban las actividades petroleras y la pesca industrial en el Ártico, para lograr una protección similar a la que ya se logró en la Antártida. Además ya han denunciado que compañías como Shell o Gazprom buscan hacer negocios con un grave crimen ambiental —la desaparición de los hielos por el cambio climático— que ellas mismas generaron por la quema de combustibles fósiles.
