Al final este año serán más de 20 las localidades del sur de Chile que implementarán la ordenanza “No a las bolsas plásticas”. Durante este proceso se ha usado terminología que no para todos está clara. Algunas de las palabras relacionada a la composición de las bolsas son:
- Oxo-degradable: se descompone al contacto con el oxígeno.
- Foto-degradable: se desintegra al contacto con la luz.
- Termo-degradable: se destruye con el calor.
- Bio-degradable: se descompone por la acción de microorganismos, como algas, bacterias y hongos.
- Degradable: Es un producto que con el paso del tiempo se desintegra con los efectos del sol, agua, temperatura o viento, esto dependerá del lugar donde se deseche.
Si bien lo que se estipula en las ordenanzas es “la entrega de bolsas plásticas biodegradables a sus clientes”, en algunos casos, como medio de difusión, se han utilizado bolsas TNT o de tela no tejida. El problema es que dichas bolsas están fabricadas con plástico prensado, o sea, no son ecológicas o biodegradables. Éste material puede contaminar igual o peor que las bolsas plásticas normales. Además, no se pueden lavar, por lo que resultan poco higiénicas.
Se debe tener presente que en Chile las bolsas plásticas o biodegradables no se certifican, éstas se rigen por la normal internacional ASTM 6954, la que, por el momento, no tiene homologación en nuestro país.