
El entrenador nacional Manuel Pellegrini hizo historia en España tras instalar en la final de la Conference League al Real Betis, la primera vez que el club sevillano se pone a tiro para conseguir un título europeo. En frente tuvo que sortear a la Fiorentina, a la que pudo vencer recién en el tiempo extra del partido disputado en Italia.
El elenco verdiblanco supo hacer valer el 2-1 conseguido en la ida, con un partido de alta intensidad en la vuelta.
El primer ladrillo de la victoria lo puso Antony, quien con un disparo de falta directa logró clavarla con ayuda del palo izquierdo del arquero a los 30 minutos. A pesar de sacar una buena ventaja en el marcador global, la viola no bajó los brazos, impulsada también por el aliento de su hinchada.
La llave para abrir el cerrojo español estuvo en la pelota detenida. Dos cabezazos certeros de Robin Gosens en tiros de esquina para los locales -al 34′ y al 42- puso en vilo la clasificación para los de Pellegrini. En ese momento, el global marcaba un 3-3. El partido tuvo que definirse en el alargue.
Los cambios antes de comenzar la prórroga desconfiguraron los planteamientos iniciales de ambos equipos, aunque el más afectado fue Betis. Sin su nueve titular en cancha, Aitor Ruibal ejerció de centro delantero, una posición que no acostumbra a usar, pues juega más cargado a la banda. A los 96′, Ruibal recibió un balón largo, metió un pase en profundidad a Antony para que, de frente y dentro del área, le cediera el remate a Abde que venía a toda carrera cargado un poco hacia la izquierda.
El histórico gol del marroquí fue suficiente para que el Real Betis se instale por primera vez en la final de una competición continental. En frente, hay un rival de temer. El Chelsea, quien terminó primero en la fase de liga, ya esperaba a los béticos en el partido definitorio, que se disputará el próximo 28 de mayo en Polonia.