Carreras que te permiten trabajar de manera independiente

Encontrar la vocación por una carrera puede ser una tarea complicada, más cuando esta elección la debes hacer en una etapa de la vida en la cual sigues experimentando cambios, y se tiene mucho camino por recorrer.

Así que la inspiración o los motivos por los cuales alguien decide elegir una carrera sobre otra pueden venir de diferentes partes. Cómo por ejemplo, saber dónde puedes ejercer una vez que termines la carrera o si vas a tener la posibilidad de elegir ser un profesional independiente.

Este último punto es cada vez más común dentro de las generaciones actuales. Pues a muchos les interesa, además de tener una buena calidad de vida, encontrar un ambiente laboral positivo, o a lo sumo una actividad que les permita seguir con sus pasatiempos. 

Por lo que, la idea de un trabajo de oficina en una empresa tradicional o los empleos más convencionales no suelen ser las opciones más viables.  Sin embargo, la carrera de Psicología o la carrera de Derecho, son algunas opciones de carreras clásicas o más tradicionales que son compatibles con el ejercicio profesional independiente.

Aunque son dos carreras tradicionales, ambas le permiten a los egresados elegir entre trabajar para una organización, empresa, centro de salud, etc, o dedicarse a esa rama específica dentro de la carrera sin tener que esperar a que abra una nueva vacante o se cree un puesto para lograr hacer lo que te apasiona. En resumen, dedicarte a las causas que más te importan, manejar tus horarios y ser tu propio jefe.

¿De que se trata la carrera de Psicología?

La carrera de Psicología es ideal para aquellas personas que les interesa comprender el comportamiento humano, cómo son las relaciones interpersonales, e incluso cómo ciertas situaciones u otras personas pueden llegar influir en la conducta de un individuo en particular.

A lo largo de la carrera los estudiantes de psicología adquieren conceptos y aprenden técnicas que les ayuda a canalizar  o intervenir en diferentes situaciones específicas a fin de contribuir con la calidad de vida de las personas. Pero además, son profesionales con la habilidad para enseñar las herramientas necesarias que se requieren para superar miedos, temores, controlar la ansiedad y el estrés, provocados por múltiples factores.

Dentro de la psicología, hay diferentes sub áreas, pero particularmente dos son las más compatibles con el trabajo independiente. La primera, es la Psicología Clínica, de hecho es una de las más estudiadas, y por otra parte está la Psicología Organizacional, dedicada a entender los ambientes laborales y todo lo relacionado al clima laboral.

Dos enfoques diferentes, con un mismo objetivo: ayudar a los individuos, sin que eso implique tener que depender de un centro médico u organización. Cómo lo puedes hacer, sencillo ofreciendo terapias (personales, familiares o de pareja) en un consultorio independiente o asesorando a empresas sobre cómo debe ser el trato con sus empleados.

Derecho, otra opción para ser un profesional independiente

La carrera de Derecho es otra de las que te brinda el beneficio de ejercer libremente en diferentes áreas para causas relacionadas con el derecho civil, familiar, laboral e incluso penal. Pues, los estudiantes de derecho reciben la formación necesaria que les permite tener pleno conocimiento de todas las leyes y normativas legales vigentes.

Ese es el principal conocimiento que se requiere para poder desarrollar o crear los argumentos para elaborar una defensa, así como idear las estrategias necesarias para la resolución de conflictos, los cuales pueden ser utilizados en diferentes procesos judiciales para ayudar a sus clientes sin necesidad de ser parte de una organización.

Pero eso no es todo lo que puedes hacer como abogado independiente. Al conocer las leyes, estos profesionales están en la plena capacidad de elaborar contratos de diferentes tipos: laborales, prenupciales, de arrendamiento, etc.

Abarcar diferentes campos es otra de las ventajas de ser un profesional independiente. Pues no estás limitado a un cliente o un tema en particular. O en su defecto especializarte en el campo del derecho que más te llame la atención. Derecho es sin dudas una de las carreras más apasionantes en la que te puedes embarcar.