Un artista chileno fue encarcelado tras teñir de rosa las aguas de un famoso géiser ubicado en Islandia con colorante para alimentos, lo que indignó a los habitantes del sector.
Se trata de Marco Evaristti, radicado en Copenhague (Dinamarca), quien causó polémica el año 2001, cuando presentó una serie de licuadoras con un peces vivos nadando en su interior en el Museo de Arte Contemporáneo (MAC), bajo la premisa de que los espectadores podían decidir si echaban a andar las máquinas o no.
Una instalación con la que Evaristti recorrió varios museos del mundo, siendo incluso denunciado a la policía en Dinamarca, luego de que dos peces murieran durante una exposición.
Aunque en esa ocasión el chileno no fue hallado culpable, en Islandia el asunto fue distinto. Fue acusado de violar las leyes que protegen el medio ambiente local y arrestado por la policía, tras arrojar 5 litros de tinte rojo en el Strokkur Geysir, a 70 kilómetros al noreste de Reykjavik.
“Esto no es arte, es vandalismo”, dijo el portavoz de los propietarios de la zona del Geysir, Garðar Eiríksson.
“Hago lo que hago porque soy un pintor, un pintor de paisajes que no utiliza un lienzo, pinto directamente en la naturaleza”, dijo Evaristti en su defensa. “Yo no pido permiso porque la naturaleza no pertenece a nadie. Creo en la libertad de expresión y creo que la naturaleza no pertenece a ciertas personas, sino a todo el mundo”, agregó.
“Si hubiera pedido permiso, le habría dicho que es ilegal y que nunca estaría de acuerdo con este tipo de arte de performance. Este hombre es increíblemente arrogante y sus acciones y palabras revelan su ignorancia”, dijo Eiríksson, quien añadió que las delicadas formaciones de todo el geysir podían retener el colorante rojo por un largo tiempo.
The Rauður Thermal Project, 2015
Posted by Marco Evaristti on Viernes, 24 de abril de 2015
(Fotos y video: Facebook de Marco Evaristti)
