En la ceremonia que se llevó a cabo este domingo en el Dolby Theatre, la estatuilla de oro se la llevó 20 Days in Mariupol de Mstyslav Chernov, de corte político sobre lo ocurrido en la ciudad portuaria de Ucrania con la invasión rusa.
Lo ocurrido esta noche, coincide con lo que los expertos anticipaban desde hace días, dejando a La Memoria Infinita sin el tan ansiado Oscar, pese a las buenas críticas que recibió por parte de los medios especializados durante su paso por festivales y en su debut en distintos países.
La obra de Alberdi abordaba la historia de amor de Augusto Góngora y Paulina Urrutia, la cual se vio golpeada luego del diagnóstico de Alzheimer del comunicador, ocurrido hace algunos años.
Previo a iniciada la ceremonia, Maite Alberdi publicó una imagen junto a Urrutia desde el Dolby Theatre, donde señaló que “este es un equipo que hoy celebra la dicha de haber hecho una película que nos encanta, que nos enseñó mucho y que nos hizo trabajar juntos”.
“Y al fin vamos todos a una ceremonia real. Con El Agente Topo nos tocó una versión pequeña y pandémica, así que vamos todos de la mano, orgullosos de representar a Chile y a todo el cine iberoamericano“, cerró.
La alianza permitirá que todas las operaciones de Aguas Andinas funcionen con energía 100% renovable desde 2026, reduciendo de manera significativa su huella de carbono.
Con un financiamiento de $2.600 millones otorgado por CORFO, el programa impulsará soluciones innovadoras orientadas a mejorar la experiencia de los pacientes, hacer más eficiente la gestión clínica y potenciar el trabajo del personal sanitario, en alianza con instituciones nacionales e internacionales.
Tras la cena de desagravio, se especuló con un regreso a la política de Longueira integrando un eventual gabinete de Kast o peleando la dirección de la UDI, partido al que renunció en 2021. Sin embargo, el camino del ex ministro parece estar lejos de ambas opciones.
El abogado de Karol Cariola, Juan Carlos Manríquez, valoró que "la senadora electa ha cumplido con entregar todas las respuestas que se le han pedido".
El extraño caso de Cristian Castro es, finalmente, el de un artista que perdió el centro, vagó por los bordes y regresó sin pedir permiso. No volvió a través de un hit nuevo ni de una estrategia de marketing: lo hizo mediante algo más simple y más raro -una autenticidad torpe, luminosa e irresistible, respaldada por una carrera que, vista desde hoy, nunca dejó de importar.