[Fotos] Así es la metanfetamina, la droga de Breaking Bad

La popularidad de la serie “Breaking Bad” vuelve a poner en el tapete a la metanfetamina. Un compuesto que, en la década de los ’90, causó controversia al formar parte de diversos medicamentos para bajar de peso en nuestro país.

La metanfetamina, en forma pura, es un polvo blanco, cristalino, inodoro, de sabor amargo y muy soluble en agua o etanol. No sólo bloquea las señales somáticas (como la fatiga, el sueño o el hambre), sino que puede generar hiperactividad, náuseas, alucinaciones y aumento de la agresividad, insomnio y paranoia.

Se calcula que cada año prueban por primera vez esta sustancia más de 150 mil personas y la edad media de inicio en el consumo es 19,1 años. Su uso prolongado provoca un deterioro físico progresivo y altera el funcionamiento del cerebro, lo que disminuye el rendimiento motor y deteriora el aprendizaje verbal.

El sitio de la Fundación por un Mundo Sin Drogas señala que “a la larga, el consumo de metanfetamina puede causar daños irreversibles; aumento del ritmo cardíaco y de la presión arterial; vasos sanguíneos dañados en el cerebro que pueden causar derrame cerebral o latidos irregulares y que a su vez pueden causar colapso cardiovascular, colapso o muerte; y daño al hígado, los riñones y a los pulmones. (…) Los usuarios pueden sufrir daño cerebral, incluyendo pérdida de memoria y una incapacidad incrementada de comprender pensamientos abstractos. Los que se recuperan están normalmente sujetos a lagunas de memoria y cambios de humor extremos“.

Frente a estos peligros, muchas de las campañas de prevención se centran en los efectos más visibles de la droga, tal como el proyecto “Faces of Meth” (Las Caras de la Metanfetamina) de la Policía del condado de Multnomah (Oregon, EEUU), donde se mostraban fotografías a los estudiantes del dramático “antes y después” del rostro de un drogadicto (ver galería abajo).

Otras organizaciones, como Rehab.com, aprovechan la fama de “Breaking Bad” para destacar los aspectos más “realistas” de la serie, poniendo siempre de relieve los perjuicios de la metanfetamina. 

“Breaking Bad es una serie original de AMC sobre el comercio de metanfetamina cristalizada. Es un retrato entretenido, pero realista de esta creciente industria. Al mismo tiempo, el espectáculo parece ensalzar la idea de ser un fabricante y distribuidor de metanfetamina, pero tan pronto como piensas que sería ‘cool’ ser uno de estos personajes, la serie te lleva de vuelta a la realidad y muestra los peligros reales de asumir ese estilo de vida”, señala el portal en un artículo dedicado a la serie.