Siete personas han muerto durante las protestas desatadas en Perú luego del fallido autogolpe y destitución del ex presidente Pedro Castillo, quien se encuentra detenido tras ser imputado por los delitos de rebelión y conspiración.
Las manifestaciones a favor de la disolución del Congreso del Perú se concentraron el en sur del país, zonas en donde el ex mandatario aún mantiene una fuerte base de apoyo.
Según lo publicado por La República, de todos los fallecidos contabilizados seis son de Apurímac y uno de Arequipa. Dos eran menores y tres tenían solo 18 años. De acuerdo a la Defensoría del Pueblo, todos los decesos ocurrieron por heridas por impacto de un arma de fuego.
Durante el lunes se registraron enfrentamientos en diversas regiones de Perú. El hecho más complejo se vivió en el aeropuerto de Arequipa, donde un grupo de manifestantes se tomó la pista de aterrizaje. Debido a esto, la operadora del terminal aéreo debió suspender todos sus vuelos de la jornada.
También se registraron algunos disturbios en Lima, la capital del país, que afectaron a las sedes de medios locales como América Televisión y Canal N, que sufrieron daños en sus instalaciones.
Adelanto de las elecciones
Las manifestaciones en contra del Congreso y del Gobierno se intensificaron a pesar del anuncio de la presidenta Dina Boluarte, quien señaló que presentará un proyecto para adelantar las elecciones generales a abril de 2024.
“Interpretando la voluntad de la ciudadanía (…) he decidido asumir la iniciativa para lograr un acuerdo con el Congreso de la República para adelantar las elecciones generales para el mes de abril del 2024”, dijo.
Pedro Castillo rompió su silencio desde la cárcel y acusó estar “secuestrado”, asegurando que aún ostenta en cargo de presidente pese a la vacancia aprobada por los congresista. El ex mandatario también calificó a su otrora vicepresidenta como una “usurpadora”.
