JN.1: la variante de Ómicron que domina los contagios de COVID-19 en el mundo
La CDC de Estados Unidos estima que hasta el 86% de los nuevos casos de COVID-19 se deben a la última mutación.
Por Sthefania Díaz
La variante JN.1 está propagándose a gran velocidad. AGENCIA UNO/ARCHIVO.
Una nueva variante proveniente de Ómicron, llamada JN.1, está propagándose a rápida velocidad y actualmente es la de mayor circulación en Estados Unidos.
La mutación fue detectada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) a finales de agosto del año pasado, pero por las altas temperaturas, aún no se propagaba tan rápido.
De esta manera, apenas comenzaron a bajar, JN.1 se disparó, contagiando a miles de personas.
A mediados de octubre, según datos de Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), esta variante representaba alrededor del 0,1% de todos los casos de COVID-19 en todo el país. Tres meses después, el 20 de enero, el organismo estimó que la cifra llegó al 86%.
Eyal Oren, director y profesor de epidemiología de la Facultad de Salud Pública de la Universidad Estatal de San Diego, dijo al medio estadounidense NPR que “lo más probable es que, si usted está contrayendo COVID en este momento, esté contrayendo esta mutación variante en particular“.
Además, explicó que “una de las razones del último aumento de este virus es que evoluciona tan rápidamente que nuestros sistemas inmunológicos no han podido seguirle el ritmo“.
La CDC y la OMS siguen llamando a la población a que se vacune, ya que, las que están disponibles hoy en día, siguen siendo eficaces. Además, lograrán reducir las enfermedades graves y evitar la hospitalización.
¿Cuáles son los síntomas de la nueva variante de Ómicron?
Los síntomas más comunes entre las personas que tienen la variante JN.1 son el dolor de garganta y la congestión. Por otro lado, la tos seca o la perdida del gusto u olfato que antes eran muy comunes, ya no lo son.
Los casos más graves sí comparten los síntomas de otras variantes, como la dificultad para respirar, dolor en el pecho o piel, labios o uñas pálidas, grises o azules que indican la falta de oxígeno.
A pesar de que se espera que los casos sigan aumentando, las pruebas con esta variante no sugieren que esté asociada a una gravedad mayor que otras que también están circulando alrededor del mundo.
