Kim Yo Jong, la hermana del líder norcoreano, Kim Jong Un, negó los reportes de la retirada de altavoces instalados a lo largo de la frontera con su vecino del sur para la difusión de propaganda, desmintiendo una presunta mejora en la relación con Seúl, asegurando que en Corea del Norte “no estamos dispuesto a hacerlo”.
“Nunca hemos retirado los altavoces instalados en la zona fronteriza y no estamos dispuestos a hacerlo”, declaró en un comunicado difundido por la agencia de noticias norcoreana KCNA.
La alta funcionaria norcoreana desmintió las recientes declaraciones del gobierno surcoreano respecto a la relación de ambos países en la península, acusándolo de “engañar a la opinión pública afirmando que (…) las relaciones entre la República Popular Democrática de Corea (RPDC) y la República de Corea del Norte se están restaurando“.
“El presidente (surcoreano) afirmó que, tras retirar los altavoces que daban a la RPDC, nosotros también parecíamos retirar algunos, con la esperanza de que las medidas de la otra parte, como la retirada de altavoces innecesarios y costosos, contribuyeran a mejorar las relaciones intercoreanas“, señaló Kim, calificando estas palabras como “una suposición unilateral infundada y una pista falsa“.
La hermana del líder norcoreano también rechazó que el gobierno surcoreano esté aplicando una “política de apaciguamiento” o adoptando “medidas de buena voluntad”. Según afirmó, el presidente surcoreano Lee Jae Myung —quien asumió el cargo en junio y posteriormente ordenó el cese de las transmisiones hacia el Norte, además de pedir a los activistas que dejaran de enviar panfletos críticos con Pyongyang— solo busca “obtener una respuesta favorable y ser elogiado por su buena acción“.
La semana pasada, Kim ya había reiterado la postura de Pyongyang al afirmar que “no hay motivo para reunirnos ni asunto que discutir con la República de Corea“, descartando por completo cualquier posibilidad de diálogo en el corto plazo.
Corea del Norte y Corea del Sur actualmente continúan técnicamente en guerra, ya que la Guerra de Corea (1950-1953) concluyó con un armisticio, no con un tratado de paz definitivo. Desde entonces, las tensiones persisten sin que se haya alcanzado un acuerdo que ponga fin de manera oficial al conflicto.