Taiwán comenzó este miércoles el reparto masivo de la última edición de su Guía Nacional de Seguridad Pública, un manual que por primera vez llega a los 9,83 millones de hogares del país en el marco de las tensiones entre China y Japón. El documento, elaborado desde 2022, busca preparar a la población ante emergencias que van desde desastres naturales hasta un eventual ataque chino.
Este año incorpora, también de forma inédita, instrucciones sobre cómo actuar si un civil se encuentra frente a soldados enemigos y advierte con énfasis que, en caso de guerra, cualquier información sobre la caída del Gobierno taiwanés “es rotundamente falsa”.
El libreto inicia con una serie de preguntas destinadas a evaluar la preparación básica de cada familia: “¿Tiene suficiente comida, agua y suministros necesarios en su hogar durante un corte de energía?” o “¿Sabe que, en caso de una invasión, internet se llenará de desinformación difundida por el enemigo, destinada a minar la moral y desestabilizar la sociedad?”.
El objetivo de la guía, según el Gobierno de Taiwán, es que la ciudadanía pueda reaccionar con rapidez en distintos escenarios de riesgo, incluyendo terremotos, ciclones y la “agresión de China”.
Entre las recomendaciones, la guía detalla cómo armar un kit de emergencia y cómo protegerse si un ataque aéreo sorprende a la población lejos de un refugio: “proteja la cabeza. la espalda hacia la dirección de la explosión, estable y quieto, esperando la oportunidad de moverse”.
También enumera, casi como una secuencia de escalada militar, las posibles fases de un conflicto: desde la destrucción de infraestructuras críticas hasta el “lanzamiento de ataques, agresión armada o acciones de infiltración y sabotaje“.
Las fricciones por la guía de Taiwán ante un ataque de China
La isla vive una nueva fricción diplomática, esta vez entre China y Japón, luego de que la primera ministra nipona, Sanae Takaichi, afirmara que un intento chino de bloquear o tomar Taiwán sería “una amenaza existencial” para su país.
Frente a este clima, Lin Fei-fan, vicesecretario general del Consejo de Seguridad Nacional y responsable del manual, reiteró el mensaje central del documento: “Bajo la amenaza de la guerra, Taiwán nunca se rendirá“.