Re-diseño laboral
Actualmente hay desafíos interesantes en torno al diseño de los espacios físicos y virtuales relativos al ejercicio laboral, ya que han surgido necesidades sin precedentes a las que debemos responder por medio del diseño de espacios adaptados en función de este nuevo ejercicio híbrido, integrando tecnología y espacio físico.
Por ColumnistaSeñor director:
Desde la llegada de la pandemia producida por el COVID -19 a Chile, las capacidades tecnológicas instaladas permitieron la adopción casi instantánea del teletrabajo, vinculando física y virtualmente, el espacio doméstico y laboral.
Este fenómeno llegó para quedarse, definiendo una vida laboral post pandémica e impactando a empresas y hogares, por medio de la instalación de modelos laborales híbridos, que promueven la flexibilidad horaria y espacial, otorgando una mayor autonomía al colaborador.
Esta modificación del comportamiento laboral ha tenido un impacto directo en la respuesta del mercado inmobiliario asociado a las oficinas. Según los reportes 2021 de Colliers, la producción de superficie de oficinas se detuvo durante el 2021, y la tasa de vacancia ha presentado un alza sostenida a partir de mediados del 2019, proyectando para fines de este año llegar a un 12% (para tipologías A+/A), lo que representa un alza de más del doble de la superficie disponible durante este período.
Lo anterior constituye un cambio drástico en relación al ámbito del mundo del trabajo y su mercado asociado. En consecuencia, se establecen desafíos interesantes para el diseño de los espacios físicos y virtuales relativos al ejercicio laboral, ya que han surgido necesidades sin precedentes a las que debemos responder por medio del diseño de espacios adaptados en función de este nuevo ejercicio híbrido, integrando tecnología y espacio físico, para así potenciar la flexibilidad espacial, la autonomía del colaborador y los equipos de trabajo.
Por otra parte, desde el punto de vista normativo, será necesario replantear el destino de esta superficie de oficinas que permanecerán sin demanda y que podrían caer en obsolescencia. En función de lo anterior, se hace necesario revisar planes reguladores comunales y sus ordenanzas locales, para así incorporar artículos especiales que permitan flexibilizar la norma, permitiendo nuevos usos y subdivisiones de unidades, y de esta manera apuntar hacia la sostenibilidad de dichas edificaciones.
Ian Tidy,
Director de Diseño de Espacios y Objetos UDD
