Ante el inminente traslado de los condenados por causas de DD.HH en el Penal Cordillera a Punta Peuco, sus familiares se encuentran en las inmediaciones, muchos con maletas, atentos a cualquier movimiento.
Uno de ellos es Graciela Salas, hija de Hugo Salas, que cumple condenas en esas dependencias y que en conversación con Bío Bío se mostró molesta con la decisión y descartó que existan privilegios en el Penal Cordillera como acceso a telefonía celular o internet.
La mujer se refirió al Presidente como un “un desleal”, ya que, según explica “él se comprometió con la familia militar, se comprometió a ayudar a los militares a que no pasaran estas cosas”, en relación a la reunión que tuvo Piñera cuando era candidato presidencial con un grupo de militares.
Respecto a la decisión de cerrar el penal, sostuvo que se debe al intento de acaparar “los votos de la izquierda” ante las próximas elecciones de noviembre.