Ricardo Lagos Escobar salió al paso de las repercusiones que generaron sus dichos a La Tercera, donde apuntó que Chile estaba viviendo “la peor crisis institucional de su historia” y poniendo en duda si el país podía “aguantar un año y medio” en dicho estado.
Sus palabras hicieron que surgieran públicos cuestionamientos a su “apocalíptica” visión desde la propia Nueva Mayoría, por lo que el ex Presidente salió a aclarar que no apuntaba como responsable en particular al Gobierno, si no a toda la clase política.
“Somos todos responsables. No estaba hablando como un señor que habla académicamente, hablo como lo que he sido: un participante activo en los últimos 30 años en la vida política en Chile”, expresó en el lanzamiento del libro “El Cardenal Silva Henríquez y la radio Chilena al inicio de la dictadura Pinochet”.
Lagos recalcó que “detrás de lo que yo he dicho no hay nada más que lo que señalé: me parece que hay una crisis muy profunda de legitimidad, porque hay un distanciamiento entre los ciudadanos y la dirigencia y esto no es responsabilidad del gobierno de turno”.
“Lo que ocurre -y ésta es la dificultad del tema- es que el Poder Ejecutivo, Legislativo y Judicial tienen que hacerse cargo de este tema, pero con una dificultad mayor, porque los poderes tienen poca legitimidad para hacerlo”, aseveró.
Además, mandó un mensaje a sus críticos, indicando que “tratemos de mirar el problema de más arriba y no saquemos la pequeña ventaja cotidiana, porque con eso nos damos cuenta de que tenemos confianzas mucho más disminuidas para llegar a un futuro consenso”.
“La ciudadanía nos exige que podamos dar una respuesta en común (…) Terminemos con lo que parece ser que ‘lo que dijo este señor me sirve para atacar a otro”, sentenció.