“Infancia y prioridades” se llama la columna que envió a El Mercurio Mario Waissbluth, del Centro de sistemas Públicos de la Universidad de Chile, y al mismo tiempo, fundador de Educación 2020.
En ésta, en tan sólo tres párrafos, compara la dura y triste realidad de los niños del Servicio Nacional de Menores (Sename), institución que comunicó esta semana que a lo largo de una década, literalmente, se les habían muerto más de 800 niños que estaban bajo su responsabilidad, versus lo que el gobierno ha focalizado en educación.
“Frente a una crisis que ha involucrado muertes, y un número mucho mayor e indeterminado de violaciones y golpizas de infantes y adolescentes, así como un sufrimiento indescriptible, el aumento de recursos para el Sename en el presupuesto 2017 fue de $16 mil millones”, inicia la columna.
Luego, el ingeniero aclara que “el presupuesto para gratuidad en educación superior 2017 es de $748 mil millones”.
Con estas dos cifras contrapuestas, Waissbluth asegura que “está todo claro. Los infantes vulnerados y los ya fallecidos no se toman los hogares del Sename ni marchan por la Alameda”.