El director del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), Branislav Marelic, solicitó que se revisaran las pensiones, posiblemente mal asignadas, a reclusos del centro penitenciario Punta Peuco.
Esto, luego de que la comisión investigadora por las pensiones de Dipreca y Capredena detectara que once condenados por violaciones a los derechos humanos aumentaran su jubilación gracias a una pensión de invalidez, luego de argumentar estrés post traumático en su paso por las casas de seguridad de la dictadura.
“Han sido pensionados por una causal que se llama inutilidad de segunda clase, que es una especie de invalidez. Ellos la usaron y la invocaron para pensionarse, pero no como inutilidad física, sino invalidez sicológica”, señaló el diputado Leonardo Soto (PS) durante esta semana, según consignó Cooperativa.
Marelic, en tanto, recalcó que “lo que sí hay que revisar son estas indemnizaciones, estas pensiones por estrés post traumático”.
“Por ejemplo, tenemos el antecedente de las pensiones de Gendarmería, que cuando han sido mal pagadas, Contraloría -sin ningún problema, con mucha autonomía y mucho apego a la legalidad- ha dicho que eso se tiene que devolver, eso también se tiene que revisar”, aseveró.
