Este miércoles, tras una reunión de la Presidenta Michelle Bachelet con líderes del programa de Salud de la OMS, se confirmó que la Mandataria aceptó un cargo ad-honorem para presidir ese mismo equipo, una vez que deje La Moneda en marzo próximo.
A esto se suma el cargo que aceptó en septiembre en la Junta Asesora de Alto Nivel sobre Mediación de Naciones Unidas, también sin pago, al que accedió tras una invitación del secretario general de la ONU, António Guterres.
Estos nombramientos han despertado sospechas en algunos sectores de Chile Vamos, respecto a lo que podría pasar en 2021 para las próximas postulaciones a La Moneda. Uno de ellos es el diputado electo de Evópoli Luciano Cruz-Coke.
“Confirma la posibilidad de una tercera postulación a la Presidencia, subrayando en que desconfía de la centroizquierda y el Frente Amplio logren generar un referente unido que haga el peso a la derecha en las próximas elecciones”, dijo en La Segunda.
Y agregó que esto “pone de manifiesto la intrascendencia de su coalición y, al mismo tiempo, señala con claridad que solo ella tendría el liderazgo de generar, y a la vez destruir, alianzas con posibilidades reales de gobierno (…) Bachelet padece el síndrome de Cronos: devora a sus propios hijos“.
