La Brigada de Homicidios Metropolitana citó a declarar a funcionarios del laboratorio Redsana y la Clínica Alemana por la investigación que lleva adelante la Fiscalía Oriente tras la muerte dos recién nacidos entre los días 14 y 15 de febrero.
La primera hipótesis apunta a la administración intravenosa de un alimento parenteral producido por el laboratorio Redsana, la que habría estado contaminada con la bacteria enterobacter, según ha informado el Instituto de Salud Pública (ISP).
Entre las diligencias realizadas, la Brigada de Homicidios Metropolitana ha citado a declarar al menos a 13 personas, en calidad de testigos. Entre los citados, según publica La Tercera, habría cinco que pertenecen a Redsana y el resto a personal de la Clínica Alemana.
Entre ellos, se cuenta a Carolina Ortiz, químico-farmacéutica y directora técnica de Redsana, quien fue interrogada por más de una hora en el cuartel de la PDI de Ñuñoa, además de equipo de producción y personal técnico de la empresa y enfermeras de la clínica.
En sus declaraciones, los trabajadores del laboratorio habría explicado el procedimiento de elaboración de los alimentos parenterales -que se hacen especialmente para las necesidades de pacientes-, los protocolos de Redsana para la producción de los mismos y la forma en que deben ser entregados, según publica el mismo medio.
Tras darse a conocer esta noticia, el ISP solicitó la suspensión de las faenas de la empresa y tomó muestras de todos los productos fabricados desde el 12 al 16 de febrero. En los próximos días se podrían dar a conocer los resultados de los cultivos analizados.
