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“¿Y la renuncia de Errázuriz?”: la molestia con el Papa de la mujer ícono de abusados por sacerdotes

Los obispos chilenos pusieron sus cargos a disposición del Papa Francisco, presentando así su renuncia a la espera de que el sumo sacerdote entregue su dictamen.

La noticia ha dado la vuelta al mundo: los obispos chilenos pusieron sus cargos a disposición del Papa Francisco, presentando así su renuncia a la espera de que el sumo sacerdote entregue su dictamen.

“Todos los obispos presentes en Roma, por escrito, hemos puedo nuestros cargos en las manos del Santo Padre para que libremente decida con respecto a cada uno de nosotros”, dio a conocer la Conferencia Episcopal en una declaración pública, agregando que buscan “pedir perdón por el dolor causado a las víctimas, al Papa, al pueblo de Dios al país por nuestros graves errores y omisiones”.

La noticia rápidamente llegó a oídos de las víctimas de Fernando KaradimaJuan Carlos Cruz, José Murillo y James Hamilton, quienes reaccionaron a través de sus redes sociales. El primero de ellos sostuvo: “Obispos chilenos TODOS renunciados. Inédito y bien. Esto cambia las cosas para siempre”.

https://twitter.com/jccruzchellew/status/997431202113118208

En esa misma línea, Murillo afirmó que “por dignidad, justicia y verdad: váyanse todos los obispos. Delincuentes. No supieron proteger a los más débiles, los expusieron a abusos y luego impidieron justicia. Por eso, solo merecen irse”.

Pese a ello, una de las conocedoras del caso no estuvo de acuerdo con las víctimas. Se trata de la irlandesa e icono internacional de los abusados por sacerdotes, Marie Collins, quien hace un tiempo renunció a la comisión que hizo la Iglesia para combatir los abusos al considerar que la curia no estaba colaborando.

“¿No hay renuncia del Cardenal Francisco Javier Errázuriz? ¿No hay remoción del C9 (exclusivo grupo de consulta del Papa)?”, cuestionó quien también fuera víctima de abusos en 1960.

A través de su cuenta de Twitter, agregó: “No hay obispos removidos. A todos se les permitió renunciar. Nada cambia realmente“.

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