Este lunes se logró el hallazgo de los restos de Fernanda Maciel, la joven embarazada de siete meses que estaba desaparecida desde el 10 de febrero de 2018 en Conchalí.
La mujer estaba en una bodega a 40 metros de su casa, envuelta en una lona. A un costado, el sostén que usaba ese día y las llaves de la bodega que Felipe Rojas, el principal sospechoso de su homicidio, había devuelto a su dueño.
Según consignaron fuentes de la investigación a 24 Horas, esa noche de febrero de 2018 Fernanda llegó a la bodega, donde Rojas habría intentado abusar sexualmente de ella. Tras un forcejeo, Fernanda Maciel se golpeó la cabeza, lo que fue aprovechado por el individuo para estrangularla y darle muerte.
Tras esto, cavó una fosa en el lugar y la enterró en posición fetal, lo que daría cuenta que quiso ocultar el cuerpo apenas perpetrado el delito, echándole cal y luego cemento, para así evitar su detección.
Estos antecedentes serán dados a conocer este jueves por la Fiscalía en la audiencia de formalización de cargos a Fernando Rojas.
