Luego de pasar dos años de prisión preventiva, la arquitecta Brenda Barattini fue condenada, de manera unánime, a 13 años de prisión por cortarle los genitales con unas tijeras de podar a su amante.
La mujer de 28 años fue declarada culpable de tentativa de homicidio agravado por alevosía en un juicio llevado a cabo por la Cámara 2 del Crimen de la ciudad de Córdoba en Argentina.
“Estoy muy arrepentida de lo que hice, nunca quise matar a nadie. Pido que se haga justicia. Me jodí la vida, pero quiero seguir con mi vida normal”, expresó segundos antes de escuchar la sentencia.
Sin embargo, la fiscal Laura Battistelli aseguró que Brenda sí “quiso quitarle la vida” al hombre.
“Lo estuvo planificando casi un mes y medio antes y lo llevó a cabo fríamente. Acusó de una violación a la víctima y cuando se cayó la tesis de violación, la transformó en ser víctima de violencia de género”, dijo Battistelli.
Durante el proceso judicial, la arquitecta admitió que planificó lastimar a su pareja porque él la “trataba como un trofeo”, y había compartido con sus amigos videos de ella en situación íntima.
“Vulneró mi intimidad, mi vida y mi carrera. Se había arruinado todo”, afirmó la mujer.
Por su parte, la víctima, identificada como Sergio F., de 42 años, dijo que el 25 de noviembre de 2017, Barattini le vendó los ojos como un juego erótico pero utilizó la tijera de podar, cortándole un 90% de sus genitales, por lo que el hombre, que estaba casado, debió someterse a varias operaciones de reconstrucción.
Si bien la fiscal la había acusado por lesiones gravísimas, en el juicio se cambió por intento de homicidio.