La Contraloría General de la República concretó un examen de cuentas a la Corporación Municipal de Deportes y Recreación, la Corporación Cultural y la Corporación Municipal de Cultura y Deportes de la Municipalidad de Recoleta, detectando que que su entonces director se transfirió a su cuenta personal $17,3 millones entre enero de 2023 y diciembre de 2024.
Esto, luego que el organismo contralor analizara los pagos por concepto de remuneraciones realizados por dichas corporaciones al ex funcionarios, además de revelar que tras finalizar sus labores en 2024, no devolvió $14,8 millones.
Ante esta situación, Contraloría remitió los antecedentes al Ministerio Público y al Consejo de Defensa del Estado.
El informe de examen cuentas autónomo encontró que el funcionario rindió $509.930, como gasto de representación, no obstante, el motivo del desembolso no está previsto en los estatutos de las entidades.
Por ello, la Contraloría formulará un reparo por la cifra total de $15.375.798. Además, ordenó al alcalde Fares Jadue, en su calidad de presidente de la Corporación Municipal de Cultura y Deportes, y al directorio de la entidad, “arbitrar las medidas necesarias para que los recursos sean empleados para los fines y objetivos previstos en sus estatutos”.
Fue en noviembre del año pasado que el jefe comunal le informó al involucrado el término de su contrato de trabajo como director gerente a contar del 31 de diciembre de ese año. Sin embargo, el correspondiente finiquito no fue suscrito por ambas partes. Esto, porque el entonces director les adeudaría $1.833.469, derivado de transferencias que él se realizó. No obstante, la Contraloría determinó que dicha cifra ascendería a $15.375.798.
“La Corporación Municipal de Cultura y Deportes de Recoleta deberá regularizar el término del contrato, y considerar respecto del eventual pago por concepto de indemnización los montos que el ex director gerente se asignó sin autorización por $15.375.798 e informar de ello a la Contraloría en un plazo de 60 días hábiles”, precisó la institución.
Junto con ello, detectó que, en su calidad de director gerente y como trabajador, el funcionario en cuestión firmó en 2023 y 2024, sus propios anexos de contrato, los cuales modificaron, entre otros, el monto de su remuneración, sin que existiera evidencia de una aprobación o revisión por parte del directorio del Corporación Cultural de Recoleta, y ex Corporación Municipal de Deportes y Recreación de Recoleta, como tampoco del alcalde Fares Jadue.
