Grandes empresas de alimentos iniciaron una ofensiva contra el Ministerio de Salud (Minsal) a raíz de un decreto de abril de este año sobre la ley de etiquetados, el cual obliga que los productos que tengan tres sellos “alto en” se le añada un mensaje adicional que señale “evita su consumo”.
Lo anterior no solo está relacionado a los envoltorios de los productos alimenticios, sino que también debe estar inserto en los medios de comunicación masivos, como la televisión, radio, internet, entre otros.
En este marco, la disposición del Ejecutivo señala: “La infracción de cualquiera de las disposiciones contenidas en el presente decreto será sancionada por la Secretaría Regional Ministerial de Salud respectiva en conformidad al Libro X del Código Sanitario”.
Los detalles de la disputa judicial entre empresas de alimentos y el Minsal por decreto de etiquetados
Bajo este contexto, Carozzi, Unilever, Nestlé, Tres Montes e Ideal acudieron a la Corte de Apelaciones para revertir lo anterior, de acuerdo a La Tercera.
A dichas empresas se sumaron otros gremios, tales como la Cámara Regional de Comercio de Valparaíso, la Asociación Nacional de Industriales de Cecinas, la Asociación Gremial de Industrias Proveedoras, Embotelladoras Chilenas Unidas y Eckard Alimentos.
En detalle, las empresas alegaron que el Ministerio de Salud vulnera sus derechos a desarrollar actividades económicas lícitas y el de propiedad, asegurando que la medida afectará sus ventas.
Carozzi y Nestlé en sus reclamaciones expusieron que “El Estado está imponiendo una medida que no solo no logra los fines que la sustentan (promover hábitos saludables) sino que además obliga a los productores y vendedores a incorporar un mensaje que tendrá efecto directo en sus ventas, en cuanto pretende evitar el consumo de los productos que se ofertan”.
Acusan una merma en las ventas de sus productos
Por otro lado, Ideal advirtió que esta disposición trae consigo un evento negativo que afectará el valor de sus marcas y sus ventas. “Los consumidores vincularán los productos de la empresa que cuenten con el mensaje (…) como productos dañinos para la salud, no en vano la autoridad sanitaria llama a evitar su consumo, afectando su adquisición. Ello genera un daño posiblemente irreparable”, expusieron.
Mismo argumento que utilizó Unilever: “El público asociará su mero consumo a posibles efectos nocivos para la salud, lo cual no solo falta a la verdad sino que implica la utilización de una prerrogativa legal, por parte de la autoridad, fuera de los límites que la ley establece”.
Sumado a ello, la Asociación Nacional de Industriales de Cecinas cuestionó que esta medida da pie a un trato desigual, ya que los competidores extranjeros pueden realizar promociones de sus productos en redes sociales sin poner las advertencias.
Frente a esto, el Minsal respondió que “es esencial avanzar hacia una regulación más robusta del marketing de alimentos, que proteja a toda la población, aumente la percepción del riesgo asociado al consumo de productos no saludables y garantice un entorno alimentario más sano para todos”.