José Antonio Kast regresó a La Araucanía para cerrar su campaña presidencial a tres días de la elección. En la Plaza Anibal Pinto, en el corazón de Temuco, el abanderado republicano dio su último discurso con un aire triunfalista y, a ratos, dirigido a sus adherentes en vistas a la conformación de su eventual gobierno.
“Estamos seguros de que el domingo vamos a ganar. Y va a ser hermoso”, dijo Kast al inicio de su discurso, pero advirtió: “De ahí en adelante nos va a tocar mucho trabajo. Repito siempre: va a ser difícil, va a ser duro. Van a tratar de impedir que hagamos ciertas cosas. Pero nosotros nos vamos a jugar ahí el destino de Chile”.
Detrás del vidrio blindado que ha caracterizado sus mítines y acompañado de su esposa, María Pía Adriasoal, hizo varios gestos para sus colaboradores.
Uno a uno fue felicitando a los senadores electos por La Araucanía; Rodolfo Carter, Vanessa Kaiser (PNL) y Miguel Becker (RN). En otro momento del evento, el candidato hizo pasar al escenario a algunos de sus colaboradores —Mara Sedini, Sebastián Figueroa, Ruth Hurtado, entre otros— para tomarse una foto.
El momento llamó la atención puesto que Kast debió saltarse el protocolo que su mismo equipo instauró y posó frente al vidrio blindado junto a su equipo.
El gesto no fue al azar. Por varios pasajes de su discurso, el candidato se dirigió directamente a los parlamentarios electos de su sector e incluso a los partidos que respaldan su candidatura en referencia a la conformación de su gabinete.
Al momento de agradecer a Chile Vamos, Demócratas, Amarillos y otros movimientos pos sumarse a la campaña, Kast afirmó que “tenemos que mantener esta misma unidad al día siguiente. Porque muchas veces la alegría llega hasta el día de la elección, y después, cuando toca determinar quiénes van a seguir trabajando con los equipos y no todos tienen la posibilidad de seguir, ahí se producen las tensiones”.
“Pero hemos tenido buenas conversaciones con los distintos partidos políticos para poder hacer un gobierno de emergencia, un gobierno de verdad, un gobierno que vea las necesidades y los dolores de la gente”, señaló.
En otro pasaje de su discurso, el abanderado mencionó que “podemos tener las leyes más perfectas, pero si no tenemos buenas personas en los cargos de liderazgo, en el Parlamento, en las alcaldías, en las gobernaciones, no hay ley que sirva. Y eso es lo que tenemos que cambiar. Ahora vamos a tener buenas personas en los distintos cargos y ahí les pido a todos que colaboren para que esas personas que vayan a ejercer los cargos sean las mejores personas”.
“No o aquellos que vayan a hacer operaciones políticas. No, las mejores personas. Los que tengan el gusto de hacer las cosas bien”, acotó.
Los dardos al Gobierno de Boric
Kast no dejó pasar la oportunidad de cargar contra el Gobierno de Gabriel Boric, en esta ocasión por la gestión de la crisis de seguridad en La Araucanía.
“En la región ha habido más atentados, más violencia, más abandonos, más familias obligadas a dejar sus casas”, cuestionó el abanderado comprometiendo que en su eventual gestión priorizará el desarrollo de la región.
“En la Araucanía y en Chile se va a hacer justicia. Vamos a cerrar esa herida porque hay miles de trabajadores, agricultores, emprendedores, comunidades mapuches que han sufrido por el miedo, por el miedo a unos pocos”, enfatizó el candidato.
En otro pasaje del discurso Kast cuestionó diversos aspectos de la administración actual como la situación de las listas de espera o la expropiación de la mega toma de San Antonio señalando que “lo más increíble es que este gobierno lo tuvo todo para hacer las cosas bien. No le faltó nada, no tuvo pandemia, no tuvo un estallido. Prometió solucionar todo y lo destruyó todo”.