El gobierno de Australia publicó la primera Evaluación Nacional de Riesgos Climáticos (NCRA, por sus siglas en inglés), un documento que advierte sobre los profundos impactos que podría sufrir el país si no se toman medidas urgentes contra el cambio climático, específicamente en lo que concierne el nivel del mar.
El informe revela que millones de personas podrían estar en peligro en las próximas décadas. De no reducirse significativamente las emisiones derivadas del carbón, el petróleo y el gas, hasta 1,5 millones de australianos podrían verse afectados por inundaciones costeras para 2050, cifra que se duplicaría (3 millones) hacia 2090.
Además, el documento alerta sobre un posible aumento considerable en las muertes por golpes de calor, así como un incremento sin precedentes en la frecuencia e intensidad de las olas de calor marinas. Las zonas costeras, incluyendo áreas densamente pobladas y territorios externos, figuran entre las más vulnerables.
Entre los hallazgos más preocupantes, se encuentra la situación de las comunidades remotas, que ya enfrentan dificultades debido a infraestructuras precarias y cadenas de suministro limitadas. Según el informe, estas regiones podrían experimentar un aumento significativo en los costos de transporte, lo que agravaría aún más su vulnerabilidad frente al cambio climático.
“El informe deja claro que todo el país tiene mucho en juego. El costo de no actuar siempre superará al de actuar”, declaró el ministro de Cambio Climático, Chris Bowen, durante la presentación del informe.
La evaluación sobre el nivel del mar y otros fenómenos se da a conocer justo antes de que el primer ministro de Australia, Antony Albanese, anuncie su meta de reducción de emisiones para 2035 y presente nuevas estrategias para alcanzar la neutralidad de carbono. También se esperan hojas de ruta sectoriales que guiarán la transición en seis áreas clave de la economía.