Fue el domingo 29 de junio, cuando Jeannette Jara triunfó en la primaria del oficialismo, que en los chats del Partido Nacional Libertario se planteó la incómoda pregunta: “¿Nos bajamos?”.
La preocupación era que Jara —militante del Partido Comunista— se alzara como una opción real a ganar la Presidencia de la República. Y, en ese punto, Kast aún no despegaba y compartía el segundo lugar con Evelyn Matthei. Según las encuestas, Johannes Kaiser marchaba tercero rondando entre el 5 y 6% de los respaldos. Muy lejos de los 15 a 20 puntos que llegó a marcar a principios de año.
La respuesta del comando y de Kaiser fue rotunda: ninguna posibilidad de bajarse de la carrera presidencial, ni siquiera si es que se reducía al 1% el apoyo en las encuestas.
Así llegó la fecha de inscripción de candidaturas. El 18 de agosto, Kaiser junto a su círculo de hierro —compuesto por su esposa, Ivette Avaria; su hermana, Vanessa Kaiser; y su jefe de campaña, Cristián Labbé— llegó al Servel a inscribir su candidatura. Y de paso, despejó todos los fantasmas respecto a una eventual baja de la carrera presidencial.
Al día de hoy, la bajada de la candidatura que no fue es motivo de bromas y en el comando del libertario apuestan a dar el golpe tras el segundo aire que ha tomado Kaiser en los debates, las encuestas y la gira nacional.
“Kaiser se baja”, escribió este lunes uno de los periodistas del candidato en un grupo de prensa en que se difunden las actividades del candidato. Ante el asombro de periodistas y la solicitud de más detalles, el mismo profesional aclaró: “Kaiser se baja del avión en Valdivia y se sube al bus para seguir la Ruta 4K”.
El revival de Kaiser
A pesar de que el candidato del PNL asegura no creer en las encuestas —tampoco las comenta— en su comando existe expectación por el resultado que exhibieron los sondeos el pasado fin de semana. El libertario empató con Matthei en el tercer lugar y acortó la brecha con José Antonio Kast.
Según relatan fuentes del comando a EL DÍNAMO, la posición de Kaiser es incluso mejor en las encuestas internas: estaría en un empate técnico con Kast en el segundo lugar.
Las mismas voces dicen que la clave del alza de Kast es que ha logrado quitarle votos al republicano en las últimas tres semanas y ha ganado espacio entre los votantes indecisos. Esto, a juicio del comando, gracias a la gira y el aumento en el nivel de conocimiento que ha tenido el candidato.
Eso sí, para los nacional libertarios, el segundo aire de Kaiser tiene una explicación central: la gira nacional denominada “Ruta.4k”.
Requerido por EL DÍNAMO, el jefe de campaña, Cristián Labbé apunta a que “el punto de inflexión en la campaña evidentemente es la gira. La campaña en sí misma, desde que salió el bus de la falda del cerro San Cristóbal, logró de a poco ir generando un impacto”.

En esa línea, el diputado —que pasó de las filas de la UDI al PNL— destaca que “hay varios hitos dentro del bus; se está transmitiendo en vivo gran parte de la gira, con una cercanía hacia toda la gente que está expectante cada vez que llega el bus a alguna ciudad. Y lo otro que es importante es que los puntos de prensa que ha logrado el comando son puntos de prensa ciudadanos donde se da la posibilidad a las personas que puedan hacer preguntas”.
El aspecto digital, que ha marcado toda la carrera política de Kaiser, es uno de los más importantes para su comando. Por ejemplo, una de las diferencias que hacen con respecto a otros despliegues territoriales (como el de Jara, por ejemplo, que también hizo una gira nacional), es que las convocatorias, la dinámica dentro del bus y los puntos de prensa son transmitidos por las diversas cuentas que tiene el candidato, el partido y sus cercanos en plataformas como Youtube, Tiktok o Instagram.
En el partido destacan que cada transmisión puede llegar a tener hasta 15 mil visualizaciones.

Las tres semanas críticas antes de la elección
En el comando de Kaiser aseguran que hay una “gran posibilidad” de que pase a segunda vuelta. La expectativa está puesta en que Kaiser siga quitándole votos a Kast y que la definición por el pase a la elección de diciembre sea “voto a voto”.
Para lograr ese objetivo, la estrategia no va a variar, dice Labbé.
“Lo que hemos hecho en esta campaña y lo que queda en estas tres semanas es seguir hablando de aquellos que se sienten abandonados por la clase política y por los programas de gobierno de los otros candidatos”, dice el jefe de campaña de Kiaser.
Y acota respecto a qué votantes son su objetivo: “Nosotros siempre nos hemos enfocado al ‘no sabe/no responde’’ que son las personas que están más dudosas. En las congregaciones cada vez que nos juntamos en alguna plaza de armas en alguna ciudad el 80% que asiste es gente que nunca participaba en política o que nunca tuvo decisión hacia algún partido político. Por ende es una campaña mucho más ciudadana de lo que la gente cree y esa es nuestra finalidad y eso es lo que vamos a ir consiguiendo en estas próximas tres semanas”.
La conclusión de la gira está pensada para el acto del cierre de campaña que será en Santiago, específicamente en estación Salvador. Ahí, la idea es convocar a la mayor cantidad de adherentes posibles y realizar un mitin al estilo estadounidense.