Televisión Nacional de Chile (TVN) sigue sumido en su crisis financiera comenzó el primer trimestre del año con pérdidas de $5.689 millones (del orden de US$6 millones). Se trata de un registro similar durante el mismo periodo de 2024, donde se anotó con $5.704 millones (también unos US$6 millones).
En el desagregado, TVN disminuyó sus pérdidas en un 4% entre enero y marzo, versus el mismo lapso de 2024, pasando de $4.987 millones (US$ 5,2 millones) a $4.773 millones (US$ 5 millones).
Los resultados se enmarcan tras los dichos del directorio de la señal pública, liderado por Francisco Vidal, en las que hicieron saber que las condiciones actuales del modelo de negocio de TVN “hacen imposibles la viabilidad económica de la empresa“. Además indicaron que no están dispuestos a que la empresa estatal se siga endeudando para financiar el día a día, lo que significa que con la caja chica que queda en la emisora, solo puede operar “hasta mediados” de 2026.
Los ingresos durante el trimestre pasado fueron de $10.488 millones, un 13,2% menos ante los $12.089 millones del primer trimestre de 2024
Por su parte, la señal cultural de la empresa estatal, NTV, profundizó sus pérdidas en casi un 28%, al pasar de $717 millones a $916 millones. No obstante, según el informe presentado por TVN a la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) dicha situación no aporta a la crisis ya que “más allá del efecto contable, el funcionamiento de NTV no representa una carga económica adicional para la empresa, puesto que cuenta con un presupuesto separado y financiado íntegramente con los fondos de la capitalización autorizada por ley en 2018”.
“El trabajo desarrollado por todas las áreas del canal ha permitido un aumento en la audiencia que viene como consecuencia del incremento de la producción propia y que se espera se traduzca en mayores ingresos durante el 2025“, añade el documento.
Al término del primer trimestre, los pasivos corrientes —que vencerán en menos de un año— alcanzan los $447 millones. Por otra parte, los pasivos no corrientes bordean los $67.820 millones (equivalentes a US$71 millones), de los cuales la mayor parte, unos $55.661 millones (US$58 millones), vencerá en un plazo de entre dos y cuatro años.