Universidades con baños mixtos para alumnos, otro paso para la inclusión en educación
La inclusión, la tolerancia y el diálogo con los propios estudiantes ha provocado este cambio cultural en las instituciones de educación superior.
Por Redacción EL DÍNAMO
El pasado 22 de mayo, el Ministerio de Educación publicó la circular 0768, documento que sugiere que los colegios pongan en funcionamiento al menos un baño mixto. Si bien no es una exigencia, se recomienda “dar facilidades a los niños trans para el uso de baños y duchas de acuerdo a las necesidades propias del proceso que estén viviendo, respetando su identidad de género”. La medida ya ha sido adoptada por establecimientos educacionales y, en una medida inédita y voluntaria, también se sumaron instituciones de educación superior.
Se trata de cuatro universidades que implementaron este 2018 baños mixtos a sus estudiantes conforme a los protocolos existentes respecto a la comunidad trans: la Universidad de Chile, el campus Lo Contador de la Pontificia Universidad Católica de Chile, la Universidad Diego Portales y la Universidad de Las Américas, todas pioneras en esta medida.
En conversación con El Dínamo, Isabel Pons, directora de Asuntos Estudiantiles de la Facultad de Economía y Empresa (FEE) UDP, contó que en 2013 se decidió que en el edificio administrativo y de clases de postgrado se establecieran tres baños: uno para hombres, otro para mujeres y uno mixto, que se dejó en medio de ambos. “De modo que desde hace cinco años contamos con esta modalidad. A estos baños pueden acceder funcionarios, profesores y estudiantes, obviamente sin ningún requisito o limitación”, expresó.
“Si bien en un comienzo se pensó principalmente en términos prácticos —la ventaja de poder contar con un baño de uso indistinto del género—, también teníamos el convencimiento de que podía ser un espacio para que las personas que no se sintieran encasilladas en un determinado género, dispusieran de ellos”, agregó Pons, reconociendo que “la experiencia en el edificio administrativo y de postgrado ha sido muy buena, toda la comunidad de la FEE ha valorado que exista este, y otros espacios —como que se realicen actividades relacionadas al Orgullo LGTBI— en donde cualquier persona pueda sentirse respetada y valorada”, no descartando que este tipo de baños se implementen en otros edificios.
La UDLA ha implementado un baño mixto en cada campus. Paulina Hernández, Secretaria General, indicó a El Dínamo que “somos una institución inclusiva, tolerante, comprometida con la equidad de género, la diversidad y respetuosa con la integridad de cada uno de nuestros estudiantes, es por este motivo que en una iniciativa en conjunto con líderes estudiantiles, se han tomado algunas decisiones en esta línea, entre las que destacan la implementación de un baño de uso mixto”.
Agregó que la Comisión Valores, equipo de trabajo formado por estudiantes y representantes del área académica y administrativa, fue la instancia en donde surgió la medida. “Es importante hacer presente que estos baños son una alternativa de uso porque siguen existiendo los baños de hombres y mujeres en todos nuestros campus”, recalcó.
Cabe recordar que el 7 de julio, María Ignacia Valdés se convirtió en la primera mujer trans en obtener el certificado académico con su nombre social. La estudiante de Publicidad de UDLA pudo lograr el histórico reconocimiento luego de que la institución firmará un decreto el 5 de mayo, en el cual reconoce a sus estudiantes transgéneros el derecho de solicitar el uso de su “nombre social”, en todos los documentos que tengan relación con la institución, es decir, que se refieran a ellos por el nombre de su identidad social y no el de su carnet de identidad. Hernandez contó que esta medida se adoptó luego de una petición directa que hicieron a la universidad. “Luego de una serie de análisis técnicos y legales, concluimos que era posible implementar”, explicó.
La Universidad de Chile se unió a esta iniciativa el 15 de mayo, cuando la Contraloría universitaria cursó dos resoluciones que ordenan la utilización del nombre social de dos estudiantes transgénero que cursan programas en las facultades de Derecho y Ciencias Sociales. A partir del dictamen de esta medida, la rectoría envió una circular a todas las autoridades universitarias informando del procedimiento estandarizado para que cada estudiante transgénero pueda pedir que se ocupe su nombre social para efectos internos de la universidad.
Finalmente, tras los acuerdos de la “toma feminista”, la UC anunció que los estudiantes transgénero que sean parte de la universidad podrán modificar su tarjeta universitaria o su correo institucional con su nombre social. Los alumnos que estén interesados en el cambio, podrán acercarse a la Dirección de Inclusión para ingresar los datos necesario para el proceso.
