Nadie trabaja gratis y la expeción, al parecer, no será la famosa feligresa del Santuario de la Misericordia en el pueblo de Borja ( Zaragoza, España), Cecilia Giménez, quien quiere recibir los beneficios de su infortunada, pero célebre “restauración”, ahora que en el ayuntamiento de Zaragoza, ni cortos ni perezosos, han decidido cobrar un euro por la visita a la “obra”.
La decisión no le gustó a la Señora Cecilia y ha decidido tomar acciones legales, ya que, luego del mediático episodio, apenas sale a la calle y considera que debería recibir parte de los dividendos que ha generado.