Una extraña costumbre en Albania se hizo conocida mundialmente luego de un reportaje realizado por BBC, donde se explica por qué muchas familias cuelgan peluches en las ventanas y fachadas de sus casas.
Con el tiempo, los juguetes van perdiendo su color y textura por las condiciones climáticas, dando así un espectáculo algo tenebroso al ver como se tambalean. Son los llamados “majmune” que significa en albanés “monos”, una palabra que se usa para cualquier juguete que sea blando y suave.
Según pudo reportear dicho medio, se trata de una costumbre extendida en todos los barrios, independiente de la clase socioeconómica a la que pertenezcan. Al consultar cuál es la razón de tener estos objetos colgados, la gente le responde que se trata de algo que va más allá de la religión: “es para proteger del mal de ojo“, señalan.

Es que los albaneses creen firmemente que tener un juguete colgando de las paredes de casas o departamento, puede alejar la envidia. Según ellos “si tienes algo bonito, otros te lo van a querer quitar”.
Además según uno de los entrevistados, un hombre recién llegado de las montañas, “si el mal de ojo ve incluso una piedra bonita, la va a querer partir”.
Otra persona cuenta que antes no había colocado ningún peluche, sin embargo “la policía vino. Empezaron a darme problemas. Mi hijo salió y trajo un mono y desde entonces no hemos tenido ningún problema“, afirma.
Comienzo
La costumbre de colocar “los monos” colgando en las casas se masificó luego de la caída de Unión Soviética, donde muchos prefirieron partir a los países vecinos de economías capitalistas, dada las condiciones de pobreza que todavía existen en el país.
Sin embargo, se trata de una tradición no muy diferente a otras que podemos ver en nuestro país, donde en algunos hogares mantienen “cruces de palqui”, la que se dice espanta a los brujos y los malos espíritus, o una mata de “ruda” para alejar las malas vibras.