A casi dos semanas del ataque militar de Estados Unidos contra una lancha de Venezuela sospechosa de cargar droga, donde murieron sus 11 ocupantes, la información al respecto sigue siendo escasa. Ante el misterio detrás del incidente, un grupo de senadores exigió explicaciones oficiales al presidente Donald Trump.
La poca información entregada por el Gobierno ha encendido las dudas en el debate público, con una Cámara de Representantes que tampoco ha recibido mayor información. El lugar exacto donde ocurrió el golpe, las identidades de los muertos o qué droga era la que presuntamente había a bordo son totalmente desconocidos para los ciudadanos.
Ante la situación, el grupo de legisladores envió una carta al mandatario exigiendo mayores detalles, mientras que defensores de los derechos humanos denuncian que “esta Administración está normalizando las ejecuciones extrajudiciales“.
Por su parte, la Casa Blanca insiste en que los once tripulantes de la lancha eran miembros del Tren de Aragua. Además, aseguraron que al dar la orden de abrir fuego, “el presidente se comportó de modo acorde a las leyes del conflicto armado“.
Cinco aviones F-35 de Estados Unidos elevan tensiones con Venezuela
Mientras aquella batalla interna se desarrolla, el Gobierno de Estados Unidos sigue realizando movimientos estratégicos en la zona que incomodan a Venezuela. Al menos cinco aviones de combate F-35 de la Marina estadounidense arribaron al aeropuerto regional José Aponte de la Torre, la antigua base Roosevelt Roads, en el noroeste de Puerto Rico.
Estos aviones, a los que se les incluyó una aeronave Boeing C-5 de las Fuerzas Armadas, se sumaron al despliegue desarrollado cerca de las costas venezolanas con ocho barcos militares con misiles y un submarino de propulsión nuclear, con el argumento de combatir el narcotráfico.
La medida ha sido definida por el Gobierno de Venezuela como un intento de propiciar un “cambio de régimen“.
De tal manera, el ministro de Defensa venezolano, Vladimir Padrino López, denunció el domingo que el país norteamericano realiza vuelos de “inteligencia” contra Venezuela, bajo el marco en el que aseguró que Washington quiere justificar un “plan de amenaza militar y de intervención” para “desplazar al presidente Nicolás Maduro“.