El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aseguró que la relación con China atraviesa un momento “extremadamente fuerte“, tras mantener una conversación telefónica con Xi Jinping que abrió el camino para una nueva ronda de contactos diplomáticos de alto nivel. El mandatario confirmó que viajará a Beijing en abril de 2026, luego de recibir una invitación formal del líder chino.
Según relató en Truth Social, Trump sostuvo una “muy buena llamada” con Xi, en la que abordaron temas clave de la agenda bilateral, entre ellos la guerra en Ucrania, la cooperación contra el narcotráfico y la implementación de acuerdos comerciales.
El presidente destacó especialmente los avances en materia agrícola. “Hemos hecho un trato importante para nuestros grandes agricultores, y solo mejorará. Nuestra relación con China es extremadamente fuerte”, afirmó, señalando los beneficios que proyectan los nuevos convenios para productores de soja, carne y otros sectores del campo estadounidense.
Trump explicó que esta conversación fue un seguimiento del encuentro que ambos mantuvieron hace tres semanas en la ciudad surcoreana de Busan, donde acordaron profundizar una agenda conjunta. De acuerdo con el presidente, los compromisos asumidos entonces ya muestran “avances” y permiten “enfocar la mirada en el largo plazo“. También confirmó que Xi realizará una visita de Estado a Washington más adelante en 2026.
La llamada de Donald Trump y Xi Jinping: la búsqueda de un acuerdo “duradero y justo”
Aunque el mandatario estadounidense evitó mencionar el tema de Taiwán, los medios oficiales chinos aseguraron que sí fue tratado durante la llamada y reiteraron la importancia del principio de “una sola China“. Washington, por su parte, subrayó la necesidad de mantener “canales de comunicación abiertos” ante los desafíos globales.
El Ministerio de Relaciones Exteriores chino señaló que Xi insistió en una relación basada en el “respeto mutuo” y pidió a Estados Unidos garantizar un ambiente estable de cara a las visitas recíprocas. En cuanto a Ucrania, el líder chino expresó su apoyo a un acuerdo “duradero y justo”, en línea con los llamados de diversos países del G20.
La cooperación agrícola y la lucha contra el tráfico de fentanilo también ocuparon un lugar central, con ambos gobiernos destacando la necesidad de coordinación directa. Con el viaje de Trump ya confirmado, Washington y Beijing se preparan para una nueva fase en su compleja pero estratégica relación bilateral.