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La reactivación educativa sigue siendo una urgencia

Para mantener en alto la bandera de la reactivación escolar más allá de la pandemia, corresponde comprometer a los candidatos presidenciales con el fortalecimiento de estrategias y acciones que permitan avanzar sostenidamente a la consecución de las metas declaradas para el año 2034.

Trehuaco

A comienzos del año 2023, el Gobierno convocó al Consejo de Reactivación Educativa. Invitó a representantes de diferentes ámbitos y estamentos del sistema escolar, quienes tuvimos la posibilidad de participar proponiendo recomendaciones para la recuperación y la mejora post pandemia.

Esta instancia nos permitió declarar principios que como país nos ha costado consensuar y demostró que, en el fondo, existen coincidencias fundamentales que permiten proyectar políticas educativas que aporten consistentemente a mejorar los resultados de los aprendizajes y de las experiencias educativas de los estudiantes chilenos.

Un ejemplo de esas coincidencias fueron las metas que proyectamos para el año 2034 para 4° básico y II medio y que se relacionan con: el sentido de pertenencia de los estudiantes, la percepción de protección, la disminución de alumnos con aprendizaje insuficiente en matemáticas y lectura, la asistencia escolar, los niveles de inasistencia grave y los porcentajes de permanencia en la trayectoria escolar completa.

Sin embargo, los resultados del año 2024 muestran lo difícil que será alcanzar las metas esperadas y justifican la necesidad de mantener el sentido de urgencia.

Por eso, para mantener en alto la bandera de la reactivación escolar más allá de la pandemia, corresponde comprometer a los candidatos presidenciales con el fortalecimiento de estrategias y acciones que permitan avanzar sostenidamente a la consecución de las metas declaradas para el año 2034. Y que los parlamentarios se comprometan con la mantención de estas metas y la promoción de acciones para alcanzarlas.

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