Los políticos y sus negocios: revelan inédita radiografía de conflictos de intereses en el Congreso

Casi 20 parlamentarios tienen negocios en cinco o más áreas productivas, cuya legislación no sólo es regulada precisamente por el Congreso sino que varios de ellos son autores, promotores o votan proyectos que dan el marco normativo en sectores en los que funcionan sus negocios. Algunos de ellos, incluso, no declarados.

Esta es una de las múltiples conclusiones que se pueden sacar de la nueva herramienta de la Fundación Ciudadano Inteligente denominada “Inspector de intereses”, que busca dar a los ciudadanos la mayor cantidad de información pública sobre los legisladores.

De acuerdo al catastro de la Fundación, los parlamentarios que tienen más intereses en distintos sectores económicos son el senador RN Francisco Chahuán y la diputada UDI Mónica Zalaquett  con negocios en 11 áreas distintas. Después de ellos, aparecen el diputado UDI José Antonio Kast con presencia en 10 sectores económicos y el diputado de la misma tienda Eugenio Bauer con ocho. También figuran los diputados Joaquín Tuma (PPD), Juan Carlos Latorre (DC), Edmundo Eluchans (UDI), Mario Bertolino (RN) y el senador Alejandro García Huidobro (UDI) con participaciones en siete rubros económicos.

El presidente de la Cámara Baja, Patricio Melero, al igual que los diputados Ernesto Silva (UDI), Alberto Robles (PRSD), Andrea Molina (UDI) y Gonzalo Arenas (UDI) destacan por su presencia en seis áreas y el senador Hosaín Sabag (DC) y los diputados Pablo Lorenzini (DC), Patricio Hales (PPD) y Gustavo Hasbún (UDI) cierran el criterio de búsqueda con figuración en 5 sectores.

La aplicación entrega los cruces entre áreas en las que el parlamentario tiene intereses económicos y los proyectos de ley que precisamente abordan esas áreas, para determinar posibles conflictos de intereses. “El Inspector define un posible conflicto cuando un parlamentario presenta o vota (en comisión o sala) un proyecto de ley en un área donde tiene posibles intereses económicos. Este posible conflicto existe cuando el giro de alguna de las sociedades del parlamentario incluye alguna de las áreas de interés que el proyecto pretende regular”, aclaran en Ciudadano Inteligente.

En ese sentido, de acuerdo a la información que recoge la página, Chahuán -uno de los legisladores que posee más intereses en distintas áreas- es autor de más de 90 proyectos relativos a los Órganos del Estado, 14 sobre Transportes, 12 en Vivienda y Urbanismo, ocho en el ámbito del Comercio, cinco que apuntan a consumidores, cuatro en Industria No Metálica, seis sobre Intermediarios Financieros, cuatro en Pesca y uno en Publicidad, además de votar en sala otros tantos relativos, precisamente, a áreas donde tiene sus inversiones.

Pese a ello, la página de Fundación Inteligente no busca determinar si el parlamentario debe abstenerse en cada votación, ya que eso es un tema que hay que estudiar caso a caso. En el extremo opuesto, la herramienta también consigna que 71 parlamentarios de distintas bancadas no poseen  intereses económicos en las áreas que investigó la organización.

Declaración de intereses

Otro aspecto que aborda la página es la declaración de intereses que realizó cada parlamentario al asumir su cargo en el Congreso. De acuerdo a la indagación de la Fundación Ciudadano Inteligente hay legisladores que no han reconocido todas sus participaciones en sociedades. Un ejemplo claro de esto son los diputados José Antonio Kast (UDI) y Juan Carlos Latorre (DC), quienes aparecen sólo con un 25,6% y un 21,4% de sus participaciones de negocios reconocidas en los documentos oficiales que constan en el Congreso Nacional, fuente principal del material de la nueva herramienta. Otros parlamentarios que aparecen con un bajo nivel de declaración de sus intereses son el presidente de Renovación Nacional, Carlos Larraín, con un 33,3%, el DC Patricio Vallespín con un 33,3% y el radical Alberto Robles  con un 40%.

El caso de Latorre es el más notorio por su vinculación no declarada -según el “Inspector de intereses”- con varias centrales hidroeléctricas como las sociedades anónimas Alto Perquilauquén, Allipén, Ancoa, Mallarauco, Puclaro y Río Huasco. También cuenta con participación en Swiss Hydro S.A. y en Sociedad Inmobiliaria Lonquén S.A. Donde sí reconoce participación es en la sociedad Gestión de Proyecto Eléctricos, que administra varios proyectos hídricos de menor tamaño.

En el caso del gremialista hay una serie de emprendimientos de menor tamaño en los que no habría dado a conocer su vinculación. Entre estos destacan agrícolas, cafeterías, empresas de inversiones, fuentes de soda, restaurantes y una empresa de transportes, entre otras.

Sin embargo, el diputado desmintió esta información y afirmó que la mayor parte de las sociedades en que participa fueron constituidas cuando ejercía como abogado y luego quedaron a cargo de los mandantes. Kast comenta que se contactó con la Fundación Ciudadano Inteligente para comentar que los “están absolutamente desactualizados y es labor de ellos si van a publicar datos, verificar que los mismos sean fidedignos”, aseguró.

NOTA DE LA REDACCIÓN

En relación a la nota, el senador Francisco Chahuán afirma “no haber votado nunca un proyecto en algún área de interés que haya declarado, de acuerdo a las normas legales y reglamentarias vigentes y que de las seis sociedades declaradas cuatro no tienen movimiento desde que es parlamentario y dos de ellas no iniciaron nunca actividades, mientras que las dos restantes son sociedades inmobiliarias que herede de su padre, según consta en las páginas web del Senado y la propia y dedico tiempo completo al trabajo legislativo”. Finalmente, señala que desde que es parlamentario publica su declaración de intereses y de bienes en su página web e incluso la de su señora, aún cuando no tenía obligación de hacerlo.