Toma en el Metro: Gobierno pedirá al CDE que se haga parte en proceso contra responsables

Luego de la protesta protagonizada a las 8:45 de la mañana de este lunes 9 de julio por trabajadores del call center Konecta Chile quienes se encadenaron en las vías de la estación Rodrigo Araya del Metro de Santiago, deteniendo por una hora el tránsito entre las estaciones Vicente Valdès y Ñuble, el ministro de Transportes, Pedro Pablo Errázuriz, señaló que solicitará a la empresa que ejerza todas las acciones legales que correspondan en contra de los responsables de este accionar que culminó con cuatro detenidos.

En la misma linea, el vocero de Gobierno, Andrés Chadwick, sostuvo que el Ministerio del Interior y el propio Mandatario solicitó a la empresa Metro que inicie de inmediato las acciones judiciales contra los responsables de la protesta. “El Gobierno no va a tolerar  que por situaciones de carácter particular se interrumpa los servicios generando problemas a quienes usan este transporte y se vieron privados de este derecho”, dijo.

Asimismo Errázuriz indicó que le solicitó al Consejo de Defensa del Estado (CDE) que se haga parte del proceso judicial, consigna La Tercera. 

“Nos parece inaceptable que un grupo de personas, por intereses particulares y personales, afecte al resto de la ciudadanía y en especial a los usuarios del transporte público, que a esa hora se trasladaban hacia sus lugares de trabajo o estudio. Por eso, hemos pedido a Metro que ejerza todas las acciones legales contra los responsables y como Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones solicitaremos además al Consejo de Defensa del Estado que se haga parte del proceso, para que estas situaciones –tan injustas para las personas que utilizan el transporte público- no vuelva a repetirse”, apuntó el ministro.

Más micros y boletos gratis

La protesta de cerca de un centenar de trabajadores en huelga, que se inició en las inmediaciones de la estación, en la avenida Vicuña Mackenna, generó un aumento en la demanda de la línea 210 del Transantiago, que une Puente Alto con Estación Central, recorrido que además tuvo que ser desviado más de 4 kilómetros de su ruta habitual, debido al cierre de las ocho estaciones de Metro.

En este contexto, Transantiago debió sacar a las calles 11 buses extras a las calles con capacidad de 160 pasajeros cada uno. Sin embargo, producto de esta situación las personas tuvieron que enfrentar demoras en la frecuencia de más de 20 minutos.

Tras cortar el servicio eléctrico, al administración del tren subterráneo, debió llevar a cabo evacuaciones en las estaciones afectadas de la línes 5 y entregó boletos gratis a las personas que se vieron perjudicadas por la protesta.